El papa Benedicto XVI inició este jueves una visita de cuatro días a su Alemania natal y dijo comprender a quienes abandonan la Iglesia Católica espantados por los escándalos de abusos sexuales a menores.
Se ha organizado una serie de manifestaciones de protesta, sobre todo en Berlín, donde se espera una participación de cerca de 20.000 personas.